El cinabrio es un mineral cuya forma principal de presentación es en cristales romboédricos con agujeros o en forma de masa granular. Se trata de la principal mena del mercurio y tiene usos muy diversos, habiendo sido utilizado durante mucho tiempo para la elaboración de ortodoncias y aparatos dentales.
ÍNDICE DEL ARTÍCULO
Usos del cinabrio
El cinabrio es la fuente principal o mena principal del mercurio, que a su vez se trata de un metal que se utiliza para elaborar aparatos eléctricos, también instrumentos de control industrial, para preparar de forma electrolítica el cloro, para la sosa caústica y también a modo de impermeabilizante para el mildiú. En muchos casos, años atrás se utilizó para fabricar ortodoncias, y también para instrumentos científicos, en incluso como amalgamador para el oro.
También ha sido muy utilizado durante años a modo de preservador de huesos. Es de esta creencia de la que, en la Edad Media, surge la idea de utilizarlo como elixir para la longevidad desde los alquimistas. Además, también ha sido empleado como colorante para un sólido mezclado con cera de abejas que era quebradizo y se utilizaba para poder sellar los documentos o las cartas de la realeza, denominado lacre.
Cómo reconocer un cinabrio
Si se quiere reconocer un cinabrio se debe tener en cuenta que suele cristalizar en formas romboédricas con maclas de penetración y se presenta en masas granulares. Normalmente, cuando es muy duro se le denomina cinabrio de labra porque hace mucho tiempo se tallaban figuras con dicha variedad en Almadén (Ciudad Real), y en muchas ocasiones aparece impregnado de calcitas.
Se puede reconocer fácilmente porque presenta un color rojo bermellón, con una raya escarlata. Normalmente tiene un peso elevado y forma prismas perfectos, con un característico brillo plateado.
Dónde se encuentra el cinabrio
En España pueden encontrarse yacimientos de cinabrio en Ciudad, concretamente en Almadén. Aquí se encuentra el yacimiento más grande en producción mundial de cinabrio, y en él se han recogido ejemplares de gran calidad en lo que a coloraciones y cristalizaciones se refiere.
Además, de menor importancia, también se encuentra este mineral en Asturias, en las minas de Tarna, y en Pola de Lena o en Mieres, Langreo, Villaviciosa y Caravías. En León, concretamente en Riaño y Barrios de Luna se pueden encontrar otros ejemplares y en pequeñas cantidades se le puede encontrar con la smithsonita en los Picos de Europa.
También en Navarra y en Teruel, dónde aparece acompañado de calcita y de pirita, así como con cuarzo en Albarracín. En Almería y en Granada también se pueden encontrar yacimientos y en Castellón y La Creu, en Valencia.
En algunos casos aparece con sulfuros en Murcia y con cuarzo y galena en Badajoz y en Cáceres. También se puede encontrar en los lugares en que se produce mercurio, tanto en España, como en otras zonas del mundo como California, Eslovenia, Serbia o la Toscana.
Datos interesantes sobre el cinabrio
Como datos interesantes acerca del cinabrio cabría reseñar su interesante leyenda. Se trata de un mineral que hace muchos años, cuando se consideraba que la gente fallecida regresaba después de la muerte y mucha gente sentía pavor a salir de sus casas por las noches para no encontrarse con “zombis” se utilizaba para evitarlo, para lo que las personas colocaban piedras muy pesadas sobre los cuerpos.
Además de esto, los cuerpos aparecían siempre cubiertos con un polvo de color rojizo, que no era otra cosa del cinabrio. Se consideraba que cuanto más grandes fueran las piedras y el polvo del cinabrio, mayor sería su poder mágico para lograr que los muertos no se levantaran. También había muchos casos en que la gente que había perdido a sus seres queridos les quitaba la piedra para poder volver a verlos, pero contaban las leyendas que al hacerlo se levantaba un ser sin alma, y a partir de aquí surgieron muchísimas historias.