Galena

La galena entra dentro de la clase de mineral de los sulfuros, teniendo una tonalidad en su color gris metalizada, con un brillo precioso y que nos llama mucho la atención. También puede encontrarse esta piedra con un color azulado con varias rayas entre gris y azul que ayudan a identificarla. Pese a ser un mineral del que saldrá el plomo, su dureza es relativamente baja, llegando solo a los 2,5 dentro de la escala elaborada por Mohs, aunque es capaz de romper un mineral que tenga una superficie aplanada con suma facilidad. Su forma habitual es la de cristales en forma cúbica, aunque pueden también verse en octaedros con una concentración muy elevada de formas, pegadas unas a las otras. Cuando este sulfuro es alterado y se le añaden componentes de sulfato, se convierte en lo que se denomina como anglesita, mientras que en el caso de añadírsele carbonaros, transformará en cerusita.

En las zonas en las que suele aparecer la galena también se puede localizar rocas graníticas o ácidas al igual que las pegmatíticas, ya que son minerales con una temperatura media típica, enfocándose sobre todo en los lugares hidrotermales. Aunque en menor medida, se ha encontrado en yacimientos de rocas carbonatadas, siendo esto lo menos convencional. La galena argentífera es una variedad muy valorada ya que cuenta en su composición con la plata.

La etimología de esta palabra viene del latín y era usada por el científico Plinio para mencionar las menas de plomo. Los egipcios, sin embargo, utilizaban la galena mucho antes de esta definición, aunque su uso era bastante peculiar, ya que para ellos era un cosmético que les protegía los ojos del polvo en suspensión y de la luz solar, impregnándose tanto el cuerpo como los parpados. No solamente lo iban a usar como protector solar, sino también contenía propiedades desinfectantes, sobre todo para los ojos, y repelían los insectos.

Desde la antigüedad se empezó a explotar los yacimientos de la ciudad de Cartagena, aumentando la intensidad en las guerras cartaginenses contra los romanos, sin embargo, el uso minero de estas excavaciones pasaron a propiedad de Roma que siguió beneficiándose de este mineral durante siglos.

Es muy común confundirla con otras variedades que son ricas en hierro, las cuales tienen una forma tetraédricas o incluso redondeadas. Otra de las diferencias para poder identificarlas es su color, ya que los que hemos comentado tienen un color mucho más oscuro.

En el mundo hay muchas zonas en las que se extrae la galena, pero unas de las más conocidas son las minas que se ubican en España, desde Linares hasta Jaén pasando por Cartagena o Almería. Si nos vamos a Europa, una de las más conocidas se encuentra en Alemania o Inglaterra, mientras que si cruzamos el océano Atlántico hacia América tenemos Perú o los Estados Unidos, sobre todo en Missouri.

Usos de la Galena

La galena cuenta con muchos usos, algunos de los cuales ya te lo hemos comentado anteriormente pero te iremos describiendo nuevamente en este apartado.

Empezaremos a hablar de los usos más industriales como son la extracción de las menas de plomo. Es de la galena de donde se saca este mineral tan importante para la industria y que desde hace milenios se ha ido usando tanto para armas, como para otro tipo de herramientas o instalaciones, aunque poco a poco se fueron derivando hacia otros metales más limpios.

Dentro de las propiedades curativas de la galena se puede nombrar que ayuda a prevenir la depresión, haciendo que la persona se sienta más animada, evitando que se centre en el pasado, algo que puede ocasionar melancolía y tristeza. Debe tenerse en cuenta que es un material que debe tocar el cuerpo o estar muy cerca para actuar, pudiendo estar en piezas de joyería.

La galena sobre todo va a afectar a nuestra alma y nuestro estado emocional, por lo que desde el antiguo Egipto se tenía como un mineral con propiedades mágicas. Aquel portador que tenga una piedra de galena va a sentir como su espíritu se va a potenciar, ganando en fuerza y motivación para realizar cualquier tipo de trabajo que antes era impensable que se podían conseguir, por lo que si tienes en mente un objetivo, se aconseja que se tenga cerca cuando te pones manos a la obra con dicho proyecto. Si el pasado sigue afectando a tu vida actual, conseguirás ir erradicando esos pensamientos que te llevan a pensar que cualquier tiempo pasado fue mejor, luchando por un futuro mucho mejor.

Si la persona que lleva el mineral tiene hábitos negativos, paulatinamente irán quedando a un lado, ofreciendo a dicha persona la posibilidad de cambiar para bien, creando hábitos productivos que le ayudarán a prosperar. Está especialmente indicado para aquellos portadores que suelen tener ansiedad, comiendo mucho, fumando cada dos por tres o incluso bebiendo mucho alcohol, consiguiendo que se lleve una vida sana y equilibrada. Dada todas estas propiedades que limpian e impulsan la personalidad buena del portador, conseguirá atraer el éxito y con él el dinero y otros beneficios.

Es importante que el propietario de la piedra tenga un par de días a la semana un encuentro para meditar y reflexionar con ella cerca de él. Esto hará que la galena se cargue de buenas intenciones, evitando que se vuelva a descuidar los objetivos que se tenían presentes.

Según los astrólogos y los naturalistas ven importante que este mineral se encuentre cerca de la pantorrilla, ya que es donde mayor eficacia tendrá. Igualmente se dice que si tu signo del zodiaco es Escorpio, se recomienda optar por otra piedra preciosa, ya que según los astros la galena no tendrá efectos en los nacidos en este periodo.

Para tener un talismán o amuleto no hace falta dirigirse a una tienda esotérica ya que cualquier joya que tenga galena se podrá considerar como un talismán. Lo más propicio y más fácil de encontrar y que tenga mayor proporción de este mineral es en un anillo.

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